Parece que fue ayer

La guerra civil española y la radio

Los primeros estudios de la radio franquista
Uno de los primeros estudios de Radio Nacional de España, creada por Franco el 19 de enero de 1937 con un emisor portátil facilitado por el ejército alemán.
Fernando Fernándes de Córdoba, actor y locutor eventual durante la guerra civil española
Fernando Fernández de Córdoba, locutor del último parte de guerra, donde los golpistas daban la guerra por acabada y ganada. El inicio oficial de la Dictadura Franquista

Los años de oscuridad: el golpe fascista

Cuando en 1936 una parte del ejército da el golpe de estado, en España la radio está ya muy asentada. Era el medio que conectaba a todo el páis con el resto del mundo y un isntrumento ya utilizado en la poítica y por la pólítica. Las fuerzas golpistas eran conscientes de este importante medio y rápidamente la comenzaron a utilizar como un elemento básico de su maquinaria propagandísitica. Desde el mismo día del golpe, cuando el general Franco lanza su mensaje por Radio Tenerife para pedir el apoyo a los golpistas.

Durante la guerra el bando golpista mantenía una emisión de radio dirigida sucesivamente por Jacinto Miquelarena Regueiro, Manuel Arias Paz y Antonio Tovar. A través de esta cada día se emitía el llmado Parte de guerra, en el que se radiaba el estado de la guerra según el guión facilitado por el cuartel general golpista, en Burgos. Es decir que en estos partes los nacionales siempre les iba bien y los rojos (la España democrática) igan sufriendo derrota tras derrota. Probablemtne muchos españoles se preguntarían aquello de ¿entonces porqué dura tanto la guerra?.

Los informativos de Radio Nacional heredarían posteriormente este término millitarista, y los noticiarios radiofónicos y luego también los televisados, fueron popularmente conocidos como "el parte". Aquello se fue perdiendo, los partes se convirtieron en las noticias (si era en la radio) o los telediarios (si eran en la tele). Quizás aún quede en nuestro país alguien que utilice todavía ese término o que recuerde haberlo usado cuando era pequeño.

Durante toda la guerra civil, el acto de escuchar el parte de guerra era un ritual cotidiano. El cuartel general de Franco estaba entonces en el Palacio de la Isla, en Burgos, que era la capital provisional del ejército golpista durante la guerra. Los años se nombraban partiendo del año del golpe, así el III año triunfal era la manera de llamar al año 1939. Los golpistas se referían a 1937 como el I año triunfal y a 1938 como II año triunfal. 1939 fue también llamado por este bando como Año de la Victoria. Esta costumbre de asignar eslóganes propagandísticos a los años parece estar copiada del movimiento fascista en la Italia de Mussolini, que numeraba los años en números romanos contando a partir de 1922 (año de la Marcha sobre Roma). Terminada la guerra el primero de abril pasó a ser como festivo para conmemorar el Día de la Victoria durante todo el franquismo.

El general Queipo de Llano y sus soflamas radiofónicas
El general locutor

Pero no solo eran los partes oficiales donde la radio jugó su papel en la contienda. En Andalucia el general golpista Queipo de Llano pronto se hizo con el control de Radio Sevilla y desde el 18 de julio comenzó con sus charlas en la radio. Fueron más de seiscientas intervenciones en las que arengaba a las tropas rebeldes, aterrorizaba a la población civil y a las fuerzas leales a la república. Incluso llegó a afirmar que habia ganado algunas batallas desde los micrófonos. Tenía un gran dominio del medio, conocía su poder y lo utlizaba para atemorizar, amedrentar y crear la confusión entre la población. Pura guerra psicológica llevada a cabo por este personaje en un principio monárquico convencio que pronto pasó a ser republicano leal (esto le facilitó la toma de Sevilla, pues los sevillanos pensaban que venía como defensor de la República), para finalizar metido de lleno en un golpe de estado fascista. Además del terror psicológico usaba el terror físico: fue responsable de más de 14000 crímenes de guerra. Es legendaria su alocución en la que justifica y anima a las tropas a violar a las mujeres que encuentren en su camino, decía tal que así:

Nuestros valientes legionarios y regulares han demostrado a los rojos cobardes lo que significa ser hombre de verdad. Y, de paso, también a las mujeres. Esta está totalmente justificado, porque estas comunistas y anarquistas predican el amor libre. Ahora por lo menos sabrán lo que son hombres y no milicianos maricones. No se van a librar por mucho que forcejeen y pataleen

De los partes de guerra el más conocido y celebrado por el bando de los golpistas fue el del fin de la guerra en la voz del "locutor soldado", el también actor, Fernando Fernández de Cordoba. La voz de Fernando Fernández de Córdobaha pasado a la historia unida a esta grabación del parte del fin de la guerra civil que se emitió a las 23:15 del 1 de abril de 1939. La lectura de los partes de guerra fue su única actuación en radio. Finalizada la guerra Fernández de Córdoba regresaria a su profesión como actor de cine. El cuerpo del mensaje era

En el día de hoy, cautivo y desarmado el ejército rojo, han alcanzado las tropas nacionales sus últimos objetivos militares. La guerra ha terminado. Burgos, 1º de abril de 1939, año de la victoria. El Generalísimo..

En este último parte se habla de las tropas nacionales, con lo que Franco, ya jefe único del levantamiento, subrayaba así la importancia política que para él tenía el ejército. A pesar de ser considerado como el final de la Guerra Civil Española, aún hubo combates hasta finales del mes de abril de 1939 en zonas recónditas de España a las que las tropas de Franco aún no habían llegado, e incluso despùes prosiguió una guerra de guerrillas, que se mantenía con la esperanza de una intervención aliada en España.

Este último parte fue el único parte firmado personalmente por Franco, que revisó minuciosamente su redacción e hizo varias correcciones. El texto definitivo fue llevado a toda prisa desde el burgalés Palacio de la Isla, sede del gobierno franquista durante la guerra, hasta el entonces estudio de Radio Nacional, en el cercano Paseo del Espolón. Luego se aficionó a eso de firmar y ya puestos se puso a firmar sentencias de muerte, para dejar la guerra acabada y bien acabada.

Ultimo parte de guerra franquista de la guerra civil española